El Gobierno libanés aprobó establecer una tasa a las llamadas de voz por redes sociales como WhatsApp, Facebook o Víber en un intento de aumentar los ingresos de las maltrechas arcas públicas de un país en un situación económica más que complicada.
El ministro libanés de Telecomunicaciones, Mohamad Chucair, confirmó hoy la decisión aprobada el miércoles por el Consejo de ministros que en principio pretende cobrar 20 centavos de dólar diarios por llamar a través de servicios de voz por internet.
En declaraciones a la cadena de televisión MTV, Chucair indicó que la decisión tiene que estudiarse más y anunció que la próxima semana dará una rueda de prensa con todos los detalles.
En otro comentario al canal de televisión LBC, el ministro afirmó que podrían necesitarse "uno, dos, tres o cuatro meses" para aplicar la medida.
Con esa decisión, que en principio afectaría a las llamadas y no a los mensajes de voz o a al envío de archivos, el Gobierno del primer ministro libanés, Saad Hariri, pretende ingresar 200 millones de dólares.
De consumarse la medida, el Líbano se convertiría en el primer país de la región en aplicar una medida que hasta el momento han adoptado países africanos como Zambia y Uganda.
La decisión se produce tras semanas de huelga de distintos sectores por la escasez de dólares, mientras el Gobierno trata de encontrar soluciones para resolver su abultado déficit.
El Líbano tiene una deuda de alrededor de 86.000 millones de dólares, lo que representa más del 150% del PIB, y su deuda soberana ya hace tiempo que cayó por debajo del nivel del bono basura.
La medida de tasar las llamadas en las redes sociales ya ha sido contestada.
Una de las primeras en protestar fue la diputada independiente Paula Yacoubian que afirmó “ni una libra será pagada por utilizar WhatsApp” e instó al Gobierno a renunciar a esa decisión.
La ONG SMEX (Social Media Exchange) criticó la decisión del Gobierno, recordando que el “Líbano tiene una de las tarifas de telefonía móvil más alta de la región”.
También ministros pertenecientes al grupo chií Hizbulá anunciaron que se oponían a una medida que no hace diferencia entre libaneses y agrava la situación económica de los más necesitados.
El Gobierno también decidió entre otros aplicar una nueva tarifa a los productos del tabaco, tanto local como importado, poner más escáneres en los cruces fronterizos para combatir el contrabando y prevé aumentar el impuesto al valor agregado (IVA) en 2 puntos en 2021 y otros 2 puntos adicionales en 2022 para alcanzar el 15 % "como la mayoría de los países del mundo".