El grupo Sony redujo su beneficio neto un 14,9 % interanual hasta 340.009 millones de yenes (unos 2.810 millones de euros) entre abril y septiembre, primera mitad del año fiscal nipón, según su informe financiero publicado este miércoles.
La ganancia operativa del conglomerado tecnológico japonés ascendió a 509.880 millones de yenes (unos 4.220 millones de euros), un 17,3 % más que en el mismo período del año anterior.
Los ingresos por ventas de Sony disminuyeron un 2,1 % en dicho semestre hasta 4,05 billones de yenes (33.500 millones de euros).
La compañía dio a conocer estos datos acumulados en su informe financiero del segundo trimestre fiscal del país (julio-septiembre), período en el que el beneficio neto de Sony aumentó un 11,4 % hasta 148.590 millones de yenes (1.230 millones de euros), gracias al buen desempeño de sus segmentos de imagen, cinematográfico y de música.
El segmento de imagen experimentó en el segundo trimestre del ejercicio de 2019 un aumento del 59,5 % en su beneficio operativo y un incremento en ventas del 22 % hasta situarlas en 310.700 millones de yenes (unos 2.600 millones de euros).
Las ramas de películas y música siguieron disfrutando de un buen rendimiento, con aumentos en ganancia operativa y ventas.
El operativo del sector cinematográfico subió un 67,2 % y sus ventas un 8 % hasta 260.600 millones de yenes (2.200 millones de euros), mientras que el beneficio operativo del ramo musical aumentó un 19 % y su facturación un 7,6 % hasta 219.300 millones de yenes (unos 1.800 millones de euros).
Peor parado salió el sector de videojuegos, uno de los principales motores de Sony en los últimos años. Entre julio y septiembre el beneficio operativo de este segmento cayó un 28,3 %, hasta 65.000 millones de yenes (537 millones de euros), y sus ventas disminuyeron un 17,4 %, hasta 454.400 millones de yenes (3.756 millones de euros).
Pese al descenso semestral de beneficios, Sony revisó hoy al alza sus previsiones para la totalidad del ejercicio, en el que espera embolsar unas ganancias netas de 540.000 millones de yenes (unos 4.500 millones de euros), un 8 % que su estimación inicial de julio.
También aumentó un 3,7 % su estimación de beneficio operativo hasta 840.000 millones de yenes (unos 6.950 millones de euros), pero revisó un 2,3 % a la baja su previsión de facturación, que considera que se situará en 8,4 billones de yenes (69.500 millones de euros).