El ministro de Recursos Marinos y Agricultura de Bahamas, Michael Pintard, afirmó este jueves que los esfuerzos de su país se concentran en evitar que los ciudadanos se conviertan en refugiados climáticos, luego de la devastación que causó en septiembre pasado el huracán Dorian.
“Nuestros esfuerzos están dirigido a evitar convertirnos en refugiados climáticos. Nuestra lucha diaria es abordar la migración interna de nuestros ciudadanos debido a la ocurrencia climática”, afirmó Pintard en una intervención durante la Conferencia de Ministros de las Américas 2019, que se lleva a cabo en Costa Rica.
Esta reunión, organizada por el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), ha tenido como uno de los puntos de atención los efectos del cambio climático en la agricultura de América y el Caribe.
“La carnicería de Dorian durante tres días enseñó a nuestros ciudadanos lecciones sobre el cambio climático y el calentamiento global que años de comentarios internacionales sobre las emisiones de gases de efecto invernadero no han podido enseñar”, aseguró Pintard, quien es un sobreviviente de la devastación causada por Dorian.
Según los datos presentados por el funcionario, el costo estimado de la reconstrucción de la infraestructura básica será de aproximadamente 200 millones de dólares, y las pérdidas al sector privado, comercial y en residencias particulares se calculan entre 2.500 y 3.000 millones de dólares.
El huracán devastó las islas de Abaco y Gran Bahama, dos de las tres más pobladas del país y que representan entre el 15 % y el 18% del PIB, y que los daños al sector agrícola suman al menos 20 millones de dólares en cultivos como lima y aguacate, así como en granjas de pollos.
El ministro aseguró que su país está enfrentando dificultades para acceder a ayuda financiera y destacó la importancia de la cooperación técnica que el IICA brinda al Departamento de Agricultura de Bahamas para programas de rehabilitación con algunos de los agricultores afectados.
Las prioridades de Bahamas son restablecer los medios de vida de los agricultores y pescadores afectados por Dorian en un plazo de 12 meses; restablecer programas apícolas, promover la innovación y las nuevas tecnologías para apoyar a los jóvenes y las mujeres, adoptando tecnologías climáticamente inteligentes en la agricultura y los recursos marinos, entre otros, precisó Pintard.
El ministro recordó los graves daños humanos provocados por el huracán e hizo un llamado a para que los Gobiernos "articulen una visión clara del futuro de la agricultura y la impulsen junto con socios como el IICA".