La producción industrial de Brasil cayó un 1,2 % en el tercer trimestre de 2019 frente al mismo periodo del año pasado, informó este viernes el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (Ibge).

Con el resultado trimestral, la manufactura industrial mantuvo el comportamiento negativo observado desde el último trimestre de 2018, cuando la producción bajó un 1,3 %.

En los nueve primeros meses del año, la industria brasileña acumula una retracción del 1,4 %, similar a la acumulada en los últimos 12 meses.

Sin embargo, la producción en las fábricas en septiembre creció un 0,3 % frente al pasado agosto y mejoró un 1,1 % en la comparación con septiembre de 2018.

En el acumulado anual, el sector que más ejerció influencia negativa fue el de las industrias extractivas, que retrocedió un 9,8 % entre enero y septiembre.

También acumulan pérdidas los sectores papelero (-3,7 %), de mantenimiento, reparación e instalación de máquinas y equipamientos (-9,1 %), productos madereros (-5,6 %), equipos de informática, productos electrónicos y ópticos (-2,8 %) y el de otros equipamientos de transporte (-10,9 %).

En la otra punta, entre las 11 actividades que han registrado aumentos en su producción destaca la influencia del sector de vehículos automotores, remolques y carrocerías, que avanzó el 2,7 %.

Igualmente tuvieron impactos positivos el sector metalúrgico (+5,0 %) y el de bebidas (+3,6 %).

En 2018, la producción industrial en Brasil creció un 1,1 %, lo que hizo que el sector cerrara con resultados positivos por segundo año consecutivo, pese a la desaceleración en relación con 2017, cuando había avanzado un 2,5 %.

El Producto Interior Bruto (PIB) de Brasil subió un 1,1 % tanto en 2017 como en 2018, reflejo de la lenta recuperación económica tras la profunda recesión que el país sufrió entre 2015 y 2016, cuando acumuló una caída de 7 puntos porcentuales.

Para este año, tampoco se espera una expansión robusta y el mercado financiero prevé un crecimiento en torno al 0,8 %.