El fabricante japonés Nissan llamó este viernes a revisión 394.025 vehículos en Estados Unidos por un defecto en el sistema de frenado que puede causar incendios por la pérdida del fluido de frenos.
Entre estos vehículos hay unidades que ya habían sido llamados a revisión por la compañía asiática con anterioridad pero que no fueron reparados por los concesionarios de Nissan.
La primera llamada a revisión para reemplazar las bombas defectuosas se produjo en 2018. Pero tras la inspección de los sistemas de ABS, algunos de los vehículos afectados por la llamada a revisión no fueron reparados.
El problema se centra en las bombas del sistema de ABS de los vehículos afectados que pierden fluido.
Nissan informó a las autoridades estadounidenses que los modelos afectados son los Nissan Murano 2015-2018, Maxima 2016-2018 y Pathfinder 2017-2019; y el Infiniti QX60. Infiniti es la marca de la gama alta del grupo Nissan.
El fabricante señaló que los concesionarios de la compañía reemplazarán la pieza defectuosa de forma gratuita.
Pero Nissan avisó que el proceso para reparar los automóviles afectados no empezará hasta el verano de 2020 por la falta de repuestos para realizar la reparación.
Nissan advirtió a los propietarios de los vehículos afectados que "si la luz de aviso de ABS permanece iluminada más de 10 segundos tras el encendido del motor, se aconseja que aparquen el vehículo en el exterior, lo alejaen de otros vehículos o estructuras y no utilizar el vehículo".