El Gobierno brasileño anunció este lunes que adoptará medidas para defender sus intereses comerciales tras el anuncio del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de que su país impondrá aranceles sobre la importación de acero y aluminio procedentes desde Brasil y Argentina.
"El Gobierno trabajará para defender el interés comercial brasileño y garantizar la fluidez del comercio con los Estados Unidos con el fin de ampliar el intercambio comercial y profundizar la relación bilateral, en beneficio de ambos países", según un comunicado divulgado por el Gobierno brasileño.
El comunicado conjunto de los Ministerios de Relaciones Exteriores, Economía y Agricultura de Brasil fue divulgado luego de que Trump anunciara, según la nota, "la posible imposición de sobretasas al acero brasileño".
El Gobierno brasileño agregó que "ya está en contacto con interlocutores en Washington" para discutir el asunto.
El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, ya había anunciado que aprovecharía el "canal directo" que tiene con Trump para discutir el asunto.
"Voy a hablar ahora con (el ministro de Economía, Paulo) Guedes y, si es el caso, llamo a Trump, porque tengo un canal abierto con él", afirmó el líder ultraderechista, que se dice un admirador de su homólogo estadounidense, con el que tiene una buena relación.
El Gobierno brasileño accionó sus alarmas luego de que Trump, en un mensaje que publicó en su cuenta en Twitter, anunciara que reimplantará "inmediatamente" los aranceles sobre todas las importaciones de acero y aluminio desde Brasil y Argentina.
El líder estadounidense acusó a los dos países de haber promovido "una devaluación masiva de sus monedas", que estaría perjudicando a los agricultores de su país, y amenazó con represalias.
"Por lo tanto, de manera inmediata, restauraré los aranceles sobre todas las importaciones de acero y aluminio enviadas a Estados Unidos desde estos países", indicó Trump.
Estados Unidos impuso en marzo de 2018 aranceles del 25 % sobre las importaciones de acero de varios países y del 10 % sobre las de aluminio en el marco de la guerra comercial trabada con China, lo que conllevó a una serie de represalias alrededor del mundo y la adopción de salvaguardas por otros países y bloques.
El gobierno estadounidense flexibilizó las tarifas poco después y Brasil aceptó un acuerdo que establece un arancel del 10 % sobre el aluminio y restricciones a sus ventas de acero.
El dólar alcanzó la semana pasada su máximo valor frente al real brasileño (4,25 reales por dólar) por diferentes factores, entre los cuales las propias tensiones comerciales entre China y EEUU.
La moneda estadounidense acumula una apreciación de cerca del 9,4 % en lo que va del año y del 5,7 % tan sólo en noviembre.
El vicepresidente de Brasil, el general de la reserva del Ejército Hamilton Mouurao negó en una reunión con empresarios que Brasil esté "devaluando artificialmente su moneda" y atribuyó la apreciación del dólar a la "tensa situación geopolítica que genera proteccionismo".