La inflación venezolana subió el pasado noviembre hasta el 35,8 %, casi el doble del marcador de octubre, cuando se registró un 20,7 %, lo que recuerda a los venezolanos que el país caribeño está, según indicó este lunes el Parlamento -de mayoría opositora-, lejos de superar la crisis económica.
El diputado Ángel Alvarado, miembro de la Comisión de Finanzas del Legislativo, dijo a periodistas que el incremento del índice era esperado, puesto que "típicamente ocurre en el último trimestre" de cada año en Venezuela debido al aumento del consumo.
Con ese número, la inflación acumulada -todo el año- pasó al 5.515,6 %, mientras que la anualizada -noviembre de 2018 a noviembre de 2019- se ubicó en 13.475,8 %.
"La hiperinflación sigue, ha menguado, pero se mantiene la hiperinflación y seguramente se va a mantener por lo menos por todo el primer semestre del año que viene, porque los desórdenes que dieron origen a la hiperinflación siguen ahí", añadió Alvarado.
Explicó que esta mengua de la inflación es causada por la política del Gobierno de Maduro de aumentar el encaje legal en las entidades bancarias.
Pero esta decisión, explicó, restringió el crédito y profundizó la caída de la economía, que hasta el mes pasado perdió en general el 43 % de su volumen.
Por su parte, el sector más dependiente de los créditos (el no petrolero) ha caído este año, aseguró, el 78 %.
"La contracción económica ha sido muy profunda, muy grande (...), este año ha sido dramático", dijo.
Los ítems de educación, equipamiento del hogar y vestido y calzado fueron los que experimentaron los mayores incrementos el pasado mes, con 102,3 %, 58,1 % y 54,6 %, respectivamente.
La Comisión de Finanzas del Parlamento venezolano empezó a ofrecer en enero de 2017 un índice de precios al consumidor debido a que el Banco Central (BCV) llevaba más de un año sin publicar la inflación y otros indicadores.
La Cámara elabora el índice en base a los precios de una cesta de bienes y servicios representativa del consumo del venezolano, a los que se les asignan unos pesos relativos, siguiendo la metodología que seguía el Banco Central para confeccionar la Encuesta de Precios que dejó de publicar por tres años.