El presidente de Argentina, Mauricio Macri, dijo este jueves que su prioridad es "estabilizar la economía", en medio de las turbulencias financieras desencadenadas tras su derrota en las primarias del 11 de agosto, y confió en revertir ese resultado electoral en las generales del 27 de octubre.
"Después de las PASO (primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias) hemos tenido una nueva incertidumbre política y económica, con lo cual estoy muy focalizado como presidente en mi responsabilidad de volver a estabilizar la economía y llevar alivio a todos los argentinos", expresó el mandatario en un acto en la ciudad de Córdoba (centro).
Al encabezar la inauguración de un centro de desarrollo de oportunidades, Macri, que opta a la reelección y fue derrotado en las PASO por el peronista Alberto Fernández -que le aventajó en unos 15 puntos y se convirtió en favorito para las presidenciales- aseveró que su objetivo es poner en "el centro" a las personas.
El mal resultado del oficialismo en las primarias provocó un fuerte terremoto en el mercado bursátil y cambiario, lo que ha agravado la crisis económica que vive el país desde 2018.
El peso, que desde hace más de un año venía cayendo progresivamente ante el dólar, se ha devaluado en las últimas tres semanas en torno al 20 %, y se espera que esto repercuta de nuevo en la inflación, que ya en 2018 fue del 47,6 %, el valor más alto desde 1991.
Ya en declaraciones a la prensa tras el acto en Córdoba, el mandatario reiteró que el resultado de las primarias generó una "disrupción económica" y alteró "todo el proceso" electoral.
"Ya la economía venía complicada desde abril del año pasado, cuando se acabó el crédito para Argentina", lamentó.
Para contener los efectos de la devaluación y su contagio a los precios comunes, el Gobierno aprobó diversas medidas como la eliminación del IVA para algunos alimentos básicos, el congelamiento del precio de la gasolina y beneficios fiscales para trabajadores y pequeñas y medianas empresas.
Además, el Ejecutivo ha comenzado a aplicar medidas de control cambiario para tratar de frenar la subida del dólar y la fuga de divisas.
"Tenemos mucho para mejorar. Una economía que hace décadas que no funciona", incidió Macri.
Consultado por si confía en que se puede revertir el resultado de las PASO -Fernández obtuvo un 47,78 % de los votos, frente al 31,80 % que cosechó Macri, seguido después por el resto de candidatos-, el mandatario se mostró tajante: "Claro que sí. Para eso estamos", señaló.
En los comicios presidenciales y legislativos del 27 de octubre vencerá el candidato que coseche más del 45 % de votos o al menos el 40 % y una diferencia mayor de 10 puntos respecto de la fórmula que le sigue.
Si no, el nuevo presidente para el periodo 2019-2023 saldrá de una segunda vuelta el 24 de noviembre, en la que participarán solamente las dos listas más votadas en la primera.
"Estamos convencidos de que la elección (aún) no sucedió y estamos con toda la energía para ir al balotaje (segunda vuelta) y continuar trabajando", sentenció.
La pasada semana, una misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) -que en 2018 aprobó un préstamo para Argentina de 56.300 millones de dólares- recaló en Buenos Aires con el fin de realizar sus habituales reuniones con el Gobierno y la oposición para estudiar un nuevo desembolso del crédito, por 5.400 millones de dólares, en el marco de ese acuerdo.
Macri confió en que el organismo confirmará esa partida.
"Porque hemos cumplido todo", argumentó.