
La gran industria aplaude la solución ibérica pactada por España y Portugal con la Comisión Europea para intervenir el mercado eléctrico con un tope de 50 euros por megavatio (MWh) a la generación con gas natural. La medida se va a traducir en una rebaja inmediata (desde mayo) de la factura de los consumidores acogidos a la tarifa regulada (PVPC), pymes e industria. Pero los grandes consumidores piden al Gobierno que, además, fuerce a las eléctricas a subastar parte de su producción inframarginal (principalmente, nuclear e hidráulica), como se comprometió el Ejecutivo a hacer en septiembre.

















