El Gobierno de Venezuela presidido por Nicolás Maduro y la Oficina de Naciones Unidas para los Derechos Humanos suscribieron un memorando de entendimiento para fijar las líneas de cooperación en 2020 y avalar la presencia continua de dos funcionarios de derechos humanos de la ONU en suelo venezolano.
Según informó hoy la oficina dirigida por la alta comisionada chilena Michelle Bachelet, el acuerdo fue suscrito entre ella y el ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Jorge Arreaza, el pasado 20 de septiembre.
El documento "proporciona una base para la continuidad del diálogo, con miras a la futura conclusión de un acuerdo que permita establecer una oficina en Venezuela" por parte de la Oficina de Naciones Unidas, indicó un comunicado de esta agencia.
Con el memorando, fruto de la visita de Bachelet a Venezuela el pasado mes de junio, también se espera facilitar la visita de relatores especiales de la ONU en el país latinoamericano durante los próximos dos años.
Los funcionarios de la oficina liderada por Bachelet en suelo venezolano tendrán acceso a centros de detención y libertad de movimientos en el país, según el documento suscrito.
El acuerdo se firma pocos días después de que Bachelet presentara ante el Consejo de Derechos Humanos reunido en Ginebra un informe actualizado de la situación de las libertades fundamentales en Venezuela, en el que volvió a ser muy crítica con el régimen de Maduro por los abusos cometidos por sus fuerzas de seguridad.
El canciller Arreaza, quien también participó en el Consejo de Derechos Humanos, cuestionó la veracidad de ese informe en su intervención, y denunció lo que el Gobierno de Maduro considera un complot occidental liderado por Estados Unidos para forzar la salida del poder del líder bolivariano.
En el mismo consejo los países del llamado Grupo de Lima presentaron un proyecto de resolución sobre Venezuela en el que piden la creación de una comisión que investigue las violaciones de los derechos y libertades fundamentales ocurridas en este país desde enero de 2014.