El Ejército israelí ha anunciado una posible "infiltración en el espacio aéreo desde Líbano". Las alarmas han sonado en toda la zona norte fronteriza con Líbano, desde donde opera la milicia chií Hizbulá. La radio de las Fuerzas Armadas de Israel, GLZ, ha señalado que se trata de aproximadamente 15 drones.
Las autoridades han ordenado a los residentes de las comunidades en la frontera con Líbano y Siria que entren en sus refugios y que cierren puertas y ventanas.
Ignacio Álvarez-Ossorio, catedrático de Estudios Árabes e Islámicos en la Universidad Complutense, asegura que no le extrañaría nada que Hizbulá se sumase de alguna manera a la guerra actual.
“Netanyahu debe saber que esta batalla no es solo una batalla de la gente de Gaza y Cisjordania, sino que la responsabilidad de todo nuestro pueblo en la nación islámica y árabe exige no ser neutral. Y nosotros no los somos”, señalaba el domingo Hashem Safi Al Din, director del Consejo Ejecutivo de la milicia libanesa, considerada –como Hamás– grupo terrorista. “La resistencia ha enviado un saludo esta mañana a la resistencia palestina y decimos que este mensaje debe ser considerado con cuidado por los israelíes”.
Desde el brutal ataque de Hamás lanzado el pasado sábado, los enfrentamientos en el norte han aumentado, con varios episodios de fuego cruzado, lanzamiento de cohetes e incluso bombardeos israelíes en territorio libanés. Varios militantes de Hizbulá han fallecido estos días.