Siempre cae alguno por el camino. Y Rovana Plumb y László Trócsányi pueden ser los primeros. La socialdemócrata rumana no ha superado el examen preliminar y vinculante de la comisión de Asuntos Jurídicos del Parlamento Europeo, que este jueves ha votado en contra de validar su declaración de bienes y ha dictaminado que presentaba unos conflictos de intereses incompatibles con ser comisaria europea de Transportes.
Rovana Plumb, exministra socialdemócrata rumana, fue señalada en un caso de corrupción en 2017, acusada de ayudar al líder de su partido en una operación inmobiliaria relacionada con la compra de una isla en el río Danubio considerada de propiedad estatal.
La comisión de Asuntos Jurídicos, así, ha redactado sobre Plumb una carta preguntando cómo la Comisión Europea pretende resolver el conflicto de intereses relacionado con uno de sus préstamos personales –a una empresaria de una agencia de turismo–. En la carta se dice que si no puede resolverse, que es lo que considera la comisión, no cumpliría los requisitos para ser comisaria.
Y lo mismo ha pasado, en la misma sesión y poco después con László Trócsányi, ex ministro de Justicia de Viktor Orbán (Fidesz, PPE). El hasta ahora candidato a comisario de Ampliación fundó un despacho de abogados que trató con asuntos públicos cuando él era ministro de Justicia. En cuanto a Trócsányi, la comisión ha escrito otra carta a la Comisión Europea preguntando cómo puede resolver el conflicto de interés relacionado a sus acciones y actividades en su despacho de abogados, aunque dice que ha renunciado. En la carta se insiste en que si no puede resolverse el conflicto, no podrá ser comisario.
Estas dos cartas han sido enviadas por la presidencia de la comisión de Asuntos Jurídicos al presidente de la Eurocámara, David Sassoli, quien ha transmitido sus contenidos la presidenta electa de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. ¿Y qué ha dicho Sassoli tras leerlas? Que pedirá aclaración a la comisión de JURI para "proceder tal y como establece el reglamento".
Según el presidente de la Eurocámara, la comisión no ha argumentado de acuerdo con lo que establece el reglamento –artículo 2, punto C–. Es decir, se enumeran los inconvenientes y dicen que suponen un problema, pero no se propone solución. Y Sassoli entiende que la comisión debería proponer alguna solución, según el reglamento. "Las cartas no dejan claro el dictamen de JURI, que tiene dos opciones: cambios en el portfolio o posibilidad de resolución del conflicto que podrían permitir que se continúe con el candidato; imposibilidad del candidato de ejercer su función, en ningún caso", explican fuentes del Parlamento: "La prioridad de Sassoli es que el Parlamento haga lo que le corresponde, pero en pleno respeto al reglamento".
Sassoli, después de recibir las cartas de la comisión de Asuntos Legales, ha hablado por teléfono con Von der Leyen, y le ha pedido que aguarde hasta que la Eurocámara termine con sus procedimientos.
La pasada semana, los eurodiputados de la comisión de Asuntos Legales comenzaron a examinar las declaraciones de interés que los comisarios designados estaban obligados a remitirles para comprobar si hay conflictos de interés en relación a sus bienes financieros o por su participación en Consejos de Administración de empresas.
Y la comisión acordó pedir a Josep Borrell y otros nueve comisarios "información complementaria sobre bienes financieros", según adelantó Europa Press.
La Commission des affaires juridiques commence son examen des conflits d’intérêts des candidats à la Commission européenne. Pour l'UE, c'est une formalité et nous n'avons eu que deux jours pour examiner certaines déclarations d'intérêts. Pourtant, il y a de quoi faire ! [THREAD] pic.twitter.com/VrsAGBUG7J
— Manon Aubry (@ManonAubryFr) September 19, 2019De la decena con sospechas, Borrell superó el miércoles el examen –'Populares', socialdemócratas y liberales lo salvaron de tener que vender sus acciones de Bayer, Iberdrola y BBVA para ser vicepresidente europeo. Pero quienes lo tienen peor son los tres –el belga Didier Reynders, Justicia; la rumana Rovana Plumb, Transportes; Sylvie Goulard, Mercado Interior, Industria y Defensa– que son objeto de una investigación judicial en su contra, aunque ello no forma parte del examen de la comisión europarlamentaria.
Plumb y Trócsányi, de momento, están en el aire. Una socialista y un popular. Por lo que es previsible que en las audiencias de la próxima semana los ataques se centren en la comisaria designada de Mercado Interior, la francesa Sylvie Goulard –de la familia liberal, del partido de Emmanuel Macron–, en cuya declaración de bienes no mencionaba que recibió una suma de 10.000 euros de un centro de estudios estadounidense.
Las audiencias se desarrollarán entre el 30 de septiembre y el 8 de octubre. Borrell se examinará para el cargo el 7 de octubre ante la Comisión de Asuntos Exteriores de la Eurocámara, entre las 14.30 y las 17.30 horas.
No obstante, tanto para Plumb como para Trócsányi, el proceso de audiencias, si llegara a producirse, y en el caso de la rumana es muy improbable, será después de lo previsto: entre las soluciones de Von der Leyen para resolver los conflictos de intereses puede estar que la presidenta electa pida a Rumanía o Hungría otros candidatos.
En cuanto al austriaco Hahn (Presupuestos) y al polaco Wojciechowski (Agricultura), la comisión de Asuntos Legales ha dado el visto bueno a sus declaraciones y a que participen en las audiencias.