Estados Unidos y otros 17 países, entre los que está España, han publicado este jueves un comunicado conjunto para incrementar la presión internacional sobre el grupo islamista Hamás y exigir la liberación de los rehenes que mantiene secuestrados en la Franja de Gaza desde el pasado 7 de octubre.

“Exigimos la liberación inmediata de todos los rehenes retenidos por Hamás en Gaza desde hace más de 200 días.

El texto está suscrito por los mandatarios de Argentina, Austria, Brasil, Bulgaria, Canadá, Colombia, Dinamarca, Francia, Alemania, Hungría, Polonia, Portugal, Rumania, Serbia, España, Tailandia, Reino Unido y Estados Unidos.

Según ha explicado a la prensa un alto funcionario estadounidense, este comunicado conjunto se había planteado hace unos meses, pero las dificultades por desacuerdos en la redacción impidieron hasta ahora alcanzar un acuerdo y hacer un llamamiento conjunto. La versión del comunicado conjunto publicada este jueves fue preparada en las últimas dos semanas, ha agregado el funcionario.

En el comunicado, los líderes afirman también que “la situación de los rehenes y la población civil en Gaza, protegida por el derecho internacional, es motivo de preocupación global”. Asimismo, aluden a los esfuerzos de mediación de Qatar, Estados Unidos y Egipto para lograr una nueva tregua entre Israel y Hamás que incluya la liberación de los rehenes a cambio de la excarcelación de presos palestinos, entre otras cuestiones.

En concreto, los líderes afirman que el acuerdo que está actualmente sobre la mesa permitiría liberar a los rehenes y dar comienzo a un alto al fuego “inmediato y prolongado” en la Franja de Gaza, donde ya han muerto más de 34.300 personas, la mayoría mujeres y niños, según el recuento de las autoridades locales.

“Los gazatíes podrían regresar a sus hogares y a sus tierras, y se harían preparativos previos para garantizar que tienen refugio y pueden acceder a asistencia humanitaria”, afirman los líderes, entre los que está Pedro Sánchez.

Sin embargo, de momento, Israel ha rechazado la vuelta de los palestinos a sus hogares en el norte de la Franja, que es uno de los requisitos de Hamás; el grupo también exige la retirada total de las tropas israelíes de Gaza y un alto el fuego definitivo, algo que el Estado judío no acepta.

Este jueves se reúne el llamado gabinete de guerra israelí para abordar precisamente los términos de las conversaciones, que llevan estancadas varias semanas. Además, el gabinete tiene sobre la mesa una importante decisión: cuándo lanzar la ofensiva contra la localidad de Rafah, donde se encuentran refugiados más de un millón de gazatíes de otras zonas de la Franja. El Ejército israelí ha dicho que está preparado para esta operación, a la que se opone la comunidad internacional, pero que Tel Aviv insiste en que es necesaria para acabar con las capacidades militares de Hamás y liberar a los rehenes.

El comunicado conjunto de los líderes llega un día después de que Hamás publicara un vídeo que muestra a uno de los rehenes israelíes en Gaza, Hersh Goldberg-Polin, criticando al primer ministro Benjamín Netanyahu y a su Gobierno por no hacer lo suficiente para lograr su puesta en libertad.

Goldberg-Polin es uno de los aproximadamente 130 rehenes israelíes que todavía siguen en Gaza, aunque muchos de ellos podrían haber muerto y algunos podrían estar en manos de milicianos que no pertenecen a Hamás.