Los fiscales han presentado dos cargos contra él: posesión de un arma de fuego por un delincuente convicto y posesión de un arma de fuego con el número de serie borrado
El FBI investiga el tiroteo cerca de Trump como un “posible intento de asesinato”
Ryan Wesley Routh, el hombre detenido como sospechoso de intentar asesinar a Donald Trump mientras jugaba al golf en Florida, ha sido acusado de dos delitos federales relacionados con armas de fuego por los que podría enfrentarse hasta a 20 años de cárcel.
En el transcurso de una audiencia de poco menos de diez minutos y encabezada por el magistrado federal Ryon McCabe, los fiscales han acusado a Routh de dos cargos: posesión de un arma de fuego siendo un delincuente convicto y posesión de un arma de fuego con un número de serie borrado.
Ryan Routh ha tenido este lunes su primera comparecencia en un tribunal federal de West Palm Beach, a la que ha acudido esposado y con un uniforme de reo, tras ser arrestado el domingo como sospechoso de intentar disparar con un rifle al expresidente mientras éste jugaba en un campo de golf de su propiedad. Momentos antes de la comparecencia, las autoridades policiales dieron a conocer que el rifle AK-47 incautado en el lugar de los hechos y con la que se cree que el sospechoso pretendía disparar a Trump tenía el número de serie arañado. Según la agencia Associated Press, los registros muestran que el sospechoso pasó casi 12 horas cerca del campo de golf antes de que el Servicio Secreto le disparara.
En una entrevista con CNN, el portavoz de Servicio Secreto, Anthony Guglielmi, ha detallado que está previsto que el director interino, Ronald Rowe, se reúna este lunes con el expresidente de EEUU y candidato republicano, así como con miembros de la policía local que participaron el domingo en el operativo de detención de un hombre que estaba armado con un rifle de asalto AK-47 equipado con una mira telescópica junto al campo en el que jugaba el aspirante a la presidencia. También hará un recorrido por el Trump International Golf Club de West Palm Beach, donde se produjeron los hechos. Rowe estará en Florida “indefinidamente” hasta que concluya la investigación sobre el posible intento de asesinato.
En un mensaje publicado esta madrugada a través de Truth Social, Trump ha agradecido a los ciudadanos su preocupación y buenos deseos y también al Servicio Secreto de los Estados Unidos y al sheriff Ric Bradshaw y su oficina de Palm Beach (Florida).
El expresidente también ha apuntado con el dedo al presidente, Joe Biden, y a la candidata demócrata, Kamala Harris, en una entrevista con Fox News. “Su retórica está provocando que me disparen, cuando yo soy el que va a salvar al país, y ellos son los que están destruyendo el país, tanto desde dentro como desde fuera”. Sobre Routh, ha dicho: “Se creyó la retórica de Biden y Harris, y actuó en consecuencia”.
El sheriff Bradshaw ha relatado también que la persona detenida en relación con lo que esta siendo investigado como un intento de asesinato “no disparó ningún tiro” porque “el agente del Servicio Secreto de Estados Unidos actuó muy rápido”. “El sistema funcionó”, “esto no es como lo que pasó en Butler”, ha afirmado Bradshaw, en referencia al intento de asesinato que sufrió el expresidente en julio en un mitin en Pensilvania, en el que resultó herido en una oreja.
Biden “más ayuda” para el Servicio SecretoEn declaraciones a los medios antes de subirse en el helicóptero presidencial, el presidente estadounidense, Joe Biden, ha pedido al Congreso que haga lo necesario para proveer de más fondos al Servicio Secreto. “Una cosa que quiero dejar clara: el Servicio Secreto necesita más ayuda y el Congreso debería responder a esa necesidad”, ha afirmado. “Gracias a Dios que el presidente está bien”.
Este lunes se ha publicado la fotografía del momento en el que Ryan Routh, un hombre de 58 años que una vez apoyó a Trump pero acabó calificándolo como “idiota” y “bufón”, fue detenido. Era un obsesionado con Ucrania, Taiwán, Corea del Norte y lo que él llamaba el “fin de la humanidad”, cuenta CNN. Llegó a viajar a Kiev para tras la invasión rusa para participar en protestas y plasmó sus ideas en un libro autoeditado.
Las autoridades sospechan que Routh, propietario de una pequeña empresa de construcción en Hawái, planeaba atacar al expresidente mientras jugaba a golf. El intento de asesinato contra Trump se produjo en torno a las 13:30 hora local (17:30 GMT) del domingo.
En una conferencia de prensa, Bradshaw ofreció el mismo domingo los primeros detalles oficiales y se conoció que fueron agentes del Servicio Secreto quienes vieron a un hombre con un rifle junto a la valla del campo de golf perteneciente a Trump, donde se encontraba jugando, a unos 300-500 metros.
El Servicio Secreto le disparó y este salió corriendo de entre unos arbustos en los que se estaba escondiendo, hasta el vehículo en el que intentó huir, una camioneta negra cuya matrícula logró fotografiar un testigo. Gracias a esto, el individuo fue detenido unos minutos después en la carretera a bordo de su vehículo. En los arbustos se encontró el arma y también dos mochilas y una cámara deportiva GoPro.
Las fuerzas del orden indicaron en la conferencia de prensa que el campo de golf está rodeado de arbustos y que cuando alguien se esconde en ellos queda prácticamente “fuera de la vista”. Según dijeron, la seguridad está limitada a la zona que el Servicio Secreto considera factible y esa organización “hizo lo que tenía que hacer”.