Trump sale al rescate de Musk tras las dimisiones en el DOGE y lo mete en la primera reunión de su gabinete
Primero fue el Despacho Oval; ahora, la reunión del gabinete presidencial. Elon Musk apareció este miércoles en la primera reunión de altos cargos de la administración republicana. El presidente Donald Trump añadió una silla más a la mesa para el multimillonario después de que varios secretarios de su gobierno comenzaran a contradecir los recortes del DOGE.
Antes del encuentro, Trump ha publicado en Truth Social diciendo: “Todos los miembros del gabinete están extremadamente felices con Elon. Los medios verán eso en la reunión de esta mañana!!”
Posteriormente, Trump ha defendido ante los miembros de gabinete el ultimátum que envió Musk a los trabajadores federales. “Creo que todos en esta mesa están muy a favor de ello, y si no lo están, me gustaría que lo dijeran, pero están muy a favor. Se enviaron cartas a personas solo para averiguar si existen. ¿Trabajan? ¿Para quién trabajan? ¿Dónde están? ¿Dónde han estado trabajando? Si han estado trabajando para otras empresas u otras entidades en absoluto, siendo pagados por el gobierno”, ha dicho el presidente, que ha vuelto a alabar el trabajo de Musk.
El multimillonario, que no ha logrado un lugar en la mesa de gabinete, ha explicado el trabajo del DOGE desde una esquina de la sala. Como de costumbre, ha aparecido con su gorra negra y en camiseta, contradiciendo el código de vestimenta tradicional de la Casa Blanca.

La presencia de Musk en la reunión del gabinete vuelve a ser una imagen simbólica del grado de favor que ha conseguido granjearse con Trump. Cuando el DOGE y Musk accedieron a información sensible al entrar en algunos departamentos, como el del Tesoro y el acceso al número de la Seguridad Social, saltaron las alarmas ante el hecho de que un ciudadano privado tuviera acceso a datos sensibles de los ciudadanos. Diversos jueces han llegado a bloquear el acceso de Musk y su grupo de trabajo a este tipo de información. Ahora, Trump lo incluye en la reunión de alto nivel del gobierno, donde se discuten cuestiones de ámbito nacional y se comparte información clasificada.
Normalmente, a estas reuniones asisten el vicepresidente, los jefes de departamento –ministerios– designados por el presidente y confirmados por el Senado, así como otros funcionarios con rango de gabinete, como la jefa de Gabinete de la Casa Blanca, Susie Wiles. En el caso de Wiles, se trata de un cargo elegido directamente por el presidente, que no requiere confirmación del Senado. Musk tampoco ha pasado por ningún proceso de escrutinio legislativo, ni dirige formalmente ningún departamento de la administración, ni ocupa un cargo funcionarial con rango de gabinete. Al menos, no técnicamente.
El DOGE, pese a su nombre—Departamento de Eficiencia Gubernamental—, no es un departamento –ministerio– real, sino un grupo de trabajo con una fecha de finalización prevista en 2026. Además, un documento oficial de la Casa Blanca señaló que Musk no es el administrador del DOGE, sino un empleado especial del gobierno de Trump. No obstante, Leavitt insistió en que “Musk supervisa el DOGE”, aunque el término deja margen para la interpretación sobre las implicaciones legales de esa supervisión. Asimismo, Leavitt dijo que no revelaría el nombre del administrador real.
La incertidumbre sobre quién dirige oficialmente el DOGE o qué rango ocupa realmente Musk en todo el entramado pone aún más en entredicho la supuesta “transparencia” del grupo de trabajo. Desde hace semanas, Musk ha sido cuestionado por el posible conflicto de intereses que supone liderar los recortes contra muchas de las agencias que tienen abiertas investigaciones contra sus empresas.
Trump ha incluido a Musk en la reunión de gabinete después de que, el martes, una veintena de trabajadores del DOGE dimitieran y en medio de la irritación de los altos cargos de la administración por sus actuaciones. Diversos titulares de departamento han contradicho el ultimátum que Musk envió este fin de semana a los empleados federales.
En un correo electrónico masivo dirigido a todo el funcionariado, el DOGE pedía a los trabajadores que informaran sobre sus actividades de la última semana antes de la medianoche del lunes si no querían ser despedidos. Sin embargo, figuras clave leales al presidente, como el director del FBI, Kash Patel, pidieron a sus empleados que no respondieran, advirtiendo del riesgo de revelar información sensible.
El rechazo por parte de los altos cargos del gobierno amenazaba con poner en entredicho la unidad del Ejecutivo y la autoridad de Musk como mano derecha del presidente. Tanto Musk como Trump intentaron minimizar las tensiones. “Eso se hizo de manera amistosa. Solo en casos como, quizás, Marco [Rubio] en el Departamento de Estado, donde manejan información muy confidencial, o el FBI, que trabaja en asuntos delicados. Y no lo dicen de manera combativa con Elon en absoluto”, declaró Trump el lunes a los periodistas. No obstante, reiteró su respaldo a Musk y advirtió que los empleados que no respondieran al correo serían “semi despedidos” o “despedidos”.
Los mensajes contradictorios entre el presidente y sus jefes de departamento aumentaron aún más el caos dentro de la administración, hasta que, a última hora del lunes, Musk anunció que se daría una segunda oportunidad “a discreción del presidente”: se enviaría un segundo correo y quienes no respondieran serían despedidos. Musk presentó la decisión como un acto de clemencia, aunque, en la práctica, suponía un retroceso ante la desautorización de numerosos departamentos.
La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, insistió este martes en que “los responsables de las agencias determinarán las mejores prácticas para sus empleados” respecto a la obligación de responder al segundo correo electrónico del DOGE. En el mismo anuncio, confirmó que Musk asistirá este miércoles a la primera reunión de gabinete del presidente.