La justicia europea investiga un caso de corrupción relacionado con la compra de material militar para la OTAN. Las pesquisas, que coordina la Agencia de la Unión Europea para la Cooperación Judicial Penal (Eurojust), han conllevado acciones policiales en varios países, entre ellos España, Luxemburgo, Bélgica, Países Bajos, Italia y Estados Unidos.

Según ha informado Eurojust en un comunicado, actuales funcionarios y exfuncionarios de la alianza atlántica estarían involucrados en el caso de corrupción. La causa se está llevando a cabo por organización criminal, corrupción y blanqueo de capitales, ya que los investigadores consideran que las personas involucradas lavaban el dinero a través de empresas de auditoría.

“La investigación se refiere a posibles irregularidades en la adjudicación de contratos a contratistas de defensa para la compra de material militar para la OTAN, como municiones y drones. Más concretamente, se trataría en de la posible transmisión de información confidencial por parte de empleados de NATO Support & Procurement Agency (NSPA), con sede en el Gran Ducado de Luxemburgo, a contratistas de defensa candidatos a obtener estos contratos”, señala la Fiscalía belga.

La investigación se remonta al mes de abril. La organizacion creó el pasado 13 de mayo un grupo de coordinación para apoyar las medidas judiciales y de investigación adoptadas en todos los países afectados. “Como resultado de estas medidas, se ha identificado a varios sospechosos potenciales”, señala la nota. La policía belga detuvo a dos personas y el juez dejó en libertad solo a uno de ellos.

“Queremos llegar a la raíz de esto. Como OTAN, no aceptamos ninguna forma de cualquier violación de los principios judiciales, pero obviamente no puedo decir más sobre esto porque ahora está en manos de las autoridades judiciales”, ha dicho el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, a su llegada a la reunión informal de ministros de Exteriores de la OTAN que se está celebrando en la ciudad turca de Antalya.

En concreto, el caso afecta a la Agencia de Apoyo y Adquisiciones de la OTAN. Según ha asegurado el secretario general, fue esa organización la que dio la voz de alarma sobre las presuntas irregularidades.

La corrupción golpea al corazón de la organización que presta apoyo a la OTAN en asuntos que van desde la adquisición de armas, el suministro de combustibles, servicios portuarios y aeroportuarios e incluso el catering, en un momento en el que precisamente la alianza atlántica está presionando para llevar el gasto militar de los aliados a su récord histórico.