Las masivas protestas sociales de Chile han obligado al presidente del país, Sebastián Piñera, a hacer una profunda remodelación de su gabinete con hasta ocho cambios de ministros, entre ellos dos de los pilares del Gobierno, como el de Interior y el de Hacienda.
Los cambios responden a la necesidad del Gobierno de "cambiar para enfrentar estos nuevos tiempos" porque Chile ya "no es el mismo" que el de hace un par de semanas, como dijo Piñera al anunciar los cambios, cuando se cumple once días desde el estallido de la actual crisis social.
El presidente se desprendió de dos de sus personas de mayor confianza, como el ya exmininstro del Interior, Andrés Chadwick, primo de Piñera y responsable de la seguridad del país; y la hasta ahora portavoz, Cecilia Pérez, que también ocupó ese puesto en el primer Gobierno de Piñera, con cuya salida se busca una política de comunicación más cercana y dialogante.
Chadwick se vio absolutamente sobrepasado durante el inicio de las protestas, unos hechos que derivaron en el decreto de estados de emergencia en ciudades de casi todo el país, toques de queda nocturnos y la presencia de militares en las calles, cuya actuación junto a Carabineros ha producido varias denuncias por presuntas violaciones de derechos humanos.
En el caso de Hacienda, se busca una apertura de cara hacia las demandas de los ciudadanos para paliar las desigualdades sociales que critica la ciudadanía en las calles, frente al perfil más ortodoxo del saliente Felipe Larraín.
Además de los cargos directos afectados por las protestas, también cambiaron miembros del gabinete de forma indirecta, como los casos de la Secretaría General de la Presidencia, la Secretaría General de Gobierno, Economía, Trabajo, Bienes Nacionales y Deportes.
Esto último debido en parte al baile de ministros que fueron de una a otra cartera.
Ministerio del InteriorAndrés Chadwick fue el principal señalado por la ciudadanía y deja su cargo tras la crítica a su gestión del orden público durante las protestas y la represión de las fuerzas del Estado durante manifestaciones en todo el país.
Hasta el momento se contabilizan una veintena de muertes, seis de ellas de ciudadanos extranjeros, y cinco de esos fallecimientos presuntamente por la acción de policías o militares, además de casi 1.100 heridos y unos 3.200 detenidos, según datos del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH).
Chadwick también fue muy criticado cuando compareció ante la Cámara de Diputados en medio de los estados de emergencia y toques de queda y desligó su responsabilidad de la situación de seguridad interna. "No tengo ninguna responsabilidad política en esto", dijo.
Días después flexibilizó su postura y tras el cambio de gabinete ha dicho: "Si he fallado pido disculpas, porque lo único que he querido es servir a mi país".
Su puesto lo ha asumido Gonzalo Blumel, de 41 años, un perfil joven del que se destacan su vocación pública desde temprana edad. Hasta ahora ministro de la Secretaría General de la Presidencia, desde donde quien ejerció labores de comunicación pública, entre otras, y que no se ha visto salpicado por la gestión de la crisis social.
HaciendaEn la cartera económica de Chile salió Felipe Larraín, quien tuvo que abandonar su puesto después de que el clamor popular dejara patente que los favorables números macroeconómicos que sitúan a Chile entre las grandes potencias de Latinoamérica no se vean reflejados en los bolsillos de la gente.
Una diferencia social que es uno de los principales reclamos de las protestas, y ante el que ahora tendrá que hacer frente Ignacio Briones, de 46 años, hasta ahora decano de la Escuela de Gobierno de la Universidad Adolfo Ibáñez y previamente embajador de Chile ante la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE).
Ministerio del Economía"Quien madrugue tiene una tarifa más baja" en el metro. Fue la desafortunada frase del ya extitular de Economía, Juan Andrés Fontaine que aceleró las protestas estudiantiles contra el alza del precio en el billete del metro de Santiago, que detonaron la mayor protesta social desde que volvió la democracia a Chile.
Ahora, el Ministerio estará encabezado por Lucas Palacios, de 45 años, poeta y músico por oficio, quien se desempeñaba como subsecretario de Obras Públicas y acumula experiencia política a nivel municipal y como asesor en el Dirección de Presupuestos.
Secretaría de Gobierno y Ministerio de DeporteKarla Rubilar, de 42 años, actual intendenta (gobernadora) de la Región Metropolitana, será a partir de hoy portavoz del Gobierno después de haberse ganado la confianza de Piñera por su papel en las comunicación de la crisis social en multitud de ruedas de prensa informativas referentes a Santiago desde que el viernes 18 comenzaran las protestas.
Cecilia Pérez, hasta ahora vocera del Gobierno, posiblemente, junto a Chadwick, la persona de más confianza de Piñera, deja la Secretaría pero recala en el Ministerio del Deporte, lo que supuso la salida de la actual titular de esta cartera, Pauline Kantor.
Secretaría de Presidencia y Ministerio de bienesEl nombramiento de Gonzalo Blumel como nuevo ministro del Interior generó un movimiento en cadena. Para tapar su salida de la Secretaría General de la Presidencia, Piñera nombró al actual ministro de Bienes Nacionales, Felipe Ward, de 47 años, quien no ha sido salpicado por el contexto de protestas de los últimos 10 días.
El vacío que quedó en esa cartera patrimonial fue asumido por un nuevo integrante del Ejecutivo, Julio Isamit, abogado de 30 años, quien se desempeñaba como jefe de gabinete de la Secretaría General presidencial.
Ministerio de TrabajoPiñera también cesó a Nicolás Monckeberg como ministro del Trabajo. Fue objeto de la crítica pública y política en los últimos meses con respecto a un debate sobre la reducción de la jornada laboral.
En su puesto entra María José Zaldívar, de 44 años, licenciada en Historia, abogada y magíster en Derecho Público y que hasta el momento ejercía como titular de la Subsecretaría de Previsión Social.