El Gobierno turco aseguró este viernes que mantendrá su despliegue y su actividad militar en el norte de Siria al entender que los acuerdos con Rusia y Estados Unidos para la retirada de las milicias kurdas de su frontera no se han cumplido.

"Acordamos la retirada de los terroristas de la región en un plazo de 120 horas. Hasta ahora no se han retirado", afirmó el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, en declaraciones a los medios turcos.

El político islamista se refería al pacto cerrado con Estados Unidos el pasado día 18 para que las milicias kurdosirias YPG abandonaran una franja de 30 kilómetros a lo largo de la frontera turcosiria.

Erdogan recordó que cuatro días después Ankara acordó con Rusia dar otras 150 horas para completar esa retirada.

"No lo han cumplido. Aún tenemos problemas allí", indicó Erdogan que ayer mismo denunció la muerte de once milicianos aliados de Ankara en ataques de las YPG.

Por ello, aseguró que continuará la operación militar lanzada el pasado mes por Turquía contra las YPG, a las que Ankara considera terroristas y que fueron esenciales en la derrota del grupo yihadista Estado Islámico.

"No completaremos el trabajo hasta que el último terrorista abandone la región", dijo Erdogan, quien añadió que Turquía no abandonará Siria hasta que otros países se vayan primero.