Un grupo de 52 diputados franceses de diferentes grupos parlamentarios critican este domingo en una tribuna en el dominical Le Journal du Dimanche el "ataque a las libertades fundamentales y al ejercicio de la democracia" que -sostienen- sufren los políticos independentistas catalanes.
En el texto -que suscriben el líder de la izquierdista Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon, o el de la centrista Unión de Demócratas Independientes, Jean-Christophe Lagarde-, los diputados instan al "apaciguamiento de las tensiones y el fin de las medidas arbitrarias contra cargos elegidos en sufragio universal".
Los legisladores de la Asamblea Nacional aseguran haber esperado a que pasasen las últimas convocatorias electorales ya que su propósito "no es inmiscuirse en el debate", pero dicen que quieren expresar su "preocupación y reprobación frente a lo que nos parece un ataque a las libertades fundamentales y al ejercicio de la democracia".
"En razón de sus opciones políticas, por haber querido organizar una votación, representantes políticos son encarcelados, exiliados y se arriesgan a ser condenados a fuertes penas de prisión", opinan.
"El respeto de las reglas institucionales es una cosa, pero consideramos que el debate político no debería resolverse por la represión, por ataques a los derechos de las personas, por una forma de delito de opinión", agrega el texto.
Los diputados abren su tribuna denunciando que "desde hace meses perdura la situación de los responsables políticos catalanes" y afirman ser conscientes de que la controversia sobre el estatus de Cataluña y el futuro de España es intensa.
Entre los firmantes del texto son mayoría los integrantes de la Francia Insumisa, con 17 representados -entre ellos sus figuras más reconocidas como Mélenchon, François Ruffin o Alexis Corbiére-.
También hay 13 diputados del grupo Libertades y Territorios, que agrupa a centristas y nacionalistas corsos -como Michel Castellani-, y 15 del grupo Grupo de la Izquierda Demócrata y Republicana (comunistas), incluido su líder André Chassaigne.
El resto son miembros de la centrista UDI, además del disidente socialista Régis Juanico.
El pasado 25 de marzo, 41 senadores franceses de diferentes partidos de izquierdas y de derechas denunciaron lo que calificaron como "la represión" contra los líderes del proceso independentista catalán y pidieron en otra tribuna que Francia y la UE intervinieran para "restablecer las condiciones del diálogo".
Los promotores de la iniciativa explicaron que buscaban que Francia y otros gobiernos europeos intervengan "para que haya una mediación".
El Gobierno francés reiteró poco después su confianza en la democracia española y en su Estado de derecho, al tiempo que llamó a no inmiscuirse en la situación sobre la región de Cataluña, como también lo hizo el partido gubernamental del presidente Emmanuel Macron, La República En Marcha, y la presidencia del Senado.