El primer ministro de Irak, Adel Abdelmahdi, ha expresado este viernes en un comunicado que presentará su dimisión al Parlamento iraquí, después de una de las jornadas de protestas más violentas en el país, que están a punto de entrar en su segundo mes.

"Presentaré un escrito al Parlamento para pedir mi dimisión de la presidencia del Gobierno actual", ha manifestado Abdelmahdi en un comunicado. 

Desde el estallido de la revuelta, al menos 371 personas han muerto en las protestas en varios puntos del país, según los últimos datos de la Comisión Iraquí de Derechos Humanos. Las protestas están siendo especialmente violentas en Bagdad y en las ciudades sureñas de mayoría chií de Nayaf, Basora y Nasriya, localidades en las que se han registrado asaltos a edificios gubernamentales y consulados de Irán.