Miles de chilenos han vuelto a salir este viernes a las calles de Santiago después de varios días de tibias manifestaciones. Los manifestantes han llenado las plazas para apoyar a las dos personas que se han quedado ciegas por las acciones policiales y que se han visto reforzadas por la voz de cientos de mujeres que se han manifestado contra la violencia machista.
Han sido ellas, las mujeres y la lucha contra la violencia machista, las que han ayudado a que las manifestaciones de este viernes volvieran a ser multitudinarias. Centenares de mujeres han escenificado en distintos lugares de la capital Un violador en tu camino, la coreografía ideada por el colectivo chileno Lastesis.
Desde su representación en varios espacios públicos de Santiago por el Día mundial contra la violencia machista, Un violador en tu camino se ha viralizado y extendido a España, Francia, Alemania, Colombia, México o la República Dominicana.
Las creadoras de la canción y de la performance son cuatro amigas de Valparaíso, Lastesis, que se presentan en Instagram como un "colectivo interdisciplinario de mujeres". Daffne Valdés, Sibila Sotomayor, Paula Cometa y Lea Cáceres, todas de 31 años, decidieron ocupar el espacio público para visibilizar, con una fórmula de alto impacto y provocación, la violencia estructural que viven las mujeres en Chile (y en el mundo).
Impresionante la intervención de #Lastesis en Plaza Dignidad?? pic.twitter.com/eRFawbgjl3
— Benjamín G (@b_galvezc) November 29, 2019#LasTesis en Plaza dignidad #plazaitalia #PlazaDignidad pic.twitter.com/aEaaQKKOFW
— Bárbara Vásquez (@barbara_vsqz) November 29, 2019La crisis social chilena estalló un viernes, el 18 de octubre, y seis semanas después los viernes se han convertido en las jornadas que más personas salen a protestar en reclamo de un modelo socioeconómico más equitativo, contra el Gobierno del presidente Sebastián Piñera y en solidaridad con las víctimas que ha provocado la acción policial para contener las manifestaciones.
La convocatoria a marchar en esta jornada tenía el nombre particular de dos de estas víctimas, el de Gustavo Gatica, que recibió disparos de perdigones en el rostro durante una manifestación y este martes se supo que quedó ciego; y el de Fabiola Campillai, que también perdió esta semana la visión de ambos ojos por el impacto de una bomba de gas lacrimógeno.
"Fuerza Gustavo Gatica", se pudo leer en una cometa que sobrevolaba la Plaza Italia de Santiago, de nuevo epicentro de las protestas, que también se replicaron este día en otras ciudades del país.
"Solo la ceguera de los asesinos permite disparar a los ojos del pueblo", se leía también en una pancarta en esa misma plaza, donde muchos de los manifestantes mostraron su solidaridad con los mutilados oculares.
Hasta la fecha más de 230 personas han sufrido heridas oculares producto de balines disparados por policías, según datos del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) de Chile, unas cifras inéditas en el país y que los médicos han llegado a calificar de "epidemia".