El Gobierno de Nicolás Maduro rechazó este martes que el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas establezca una comisión de investigación sobre la situación de los derechos fundamentales en Venezuela y sostuvo que algunos Gobiernos hacen "uso político" de los mecanismos de protección de la ONU.
En un comunicado emitido este martes, la Administración de Maduro rechazó "la conformación de una pretendida Misión de Determinación de Hechos para Venezuela en el seno del Consejo de Derechos Humanos".
Para el Gobierno venezolano la creación de esta entidad es el resultado del "vergonzoso uso político de los mecanismos" de esta instancia de las Naciones Unidas, una situación de la cual responsabilizó a "un grupo reducido de gobiernos con graves expedientes de violación de derechos humanos".
El objetivo de la solicitud para investigar a Venezuela, asegura la Administración de Maduro, es "atacar las instituciones del Estado venezolano" y "ocultar las graves crisis sociales" que existen en esos países, a los que no se identifica en el documento.
A finales de septiembre, Venezuela se convirtió en el primer país latinoamericano para el que el Consejo de Derechos Humanos de la ONU creará una comisión que investigará los presuntos abusos del Gobierno, en aplicación de una resolución impulsada por el Grupo de Lima.
La resolución, patrocinada por países como Colombia, Perú y Brasil, fue aprobada con diecinueve votos a favor, siete en contra y 21 abstenciones, entre ellas las de México y Uruguay.
Estas iniciativas se tomaron a raíz del informe sobre Venezuela que la alta comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, presentó en julio pasado y en el que recomendó el fin del uso excesivo de la fuerza, de las ejecuciones extrajudiciales y de la tortura, entre otras medidas.
Según el comunicado, en la actualidad las autoridades venezolanas están "trabajando coordinadamente" con los representantes del organismo liderado por Bachelet con el fin de "abordar de manera constructiva los desafíos en materia de derechos humanos".
Este martes, el Gobierno de Maduro afirmó ha dado "amplias y reiteradas muestras de su voluntad y compromiso de cooperar" con los mecanismos de derechos humanos de Naciones Unidas siempre que se apeguen a "los principios de objetividad, no selectividad, imparcialidad, no injerencia en los asuntos internos y diálogo constructivo".
Las autoridades venezolanas recordaron que el país obtuvo el pasado octubre un sillón en el Consejo de Derechos Humanos para el periodo 2020-2022 y advirtieron que desde esa posición trabajarán "arduamente" para "despolitizar" los mecanismos de esta instancia de la ONU.