El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, reconoció este miércoles las dificultades para cerrar el próximo presupuesto comunitario para 2021-2027 por, entre otros factores, la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE), ya que "algunos pagarán más y otros recibirán más".

"Va a ser muy complejo debido al 'brexit'. Algunos países pagarán más y otros recibirán más", dijo Michel en un debate en la Eurocámara sobre los resultados de la cumbre de líderes de la UE de la semana pasada, en la que se abordó el marco financiero plurianual, el "brexit" o el objetivo de neutralidad climática para 2050.

Ante la prevista salida del Reino Unido de la UE el próximo 31 de enero, los Estados miembros deberán buscar la manera de cubrir entre 10.000 y 12.000 millones de euros anuales que aportaba ese país a las arcas comunitarias.

Michel, que está encargado de dirigir las negociaciones entre los países sobre el presupuesto, pidió "encontrar un justo equilibrio entre políticas europeas clásicas" como la agricultura y la cohesión, y otros retos como el cambio climático, la migración o la innovación.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, coincidió con Michel en la necesidad de que el presupuesto de la UE cuente con "fondos propios" que, según dijeron, podrían obtenerse del sistema europeo de comercio de emisiones de carbono.

Sobre la marcha del Reino Unido, Von der Leyen aseguró que el 1 de febrero estarán preparados para proponer un mandato de negociación de la futura relación con ese país, que contemple un acuerdo de libre comercio o colaboración en sectores como la seguridad y la defensa y que debería estar concluida a finales de 2020.

"Si no da tiempo, entonces volveremos a estar al borde del precipicio. Será más lesivo para el Reino Unido, porque la UE seguirá beneficiándose del mercado único, la unión aduanera" y más de 200 acuerdos negociados por todo el mundo, comentó.

Por lo que respecta al acuerdo "unánime" en la cumbre para que la UE logre la neutralidad climática (no producir más emisiones contaminantes de las que puede absorber un territorio) en 2050, Michel volvió a recalcar que Polonia, muy dependiente del carbón, ha pedido "más tiempo para aplicar ese acuerdo".

"Cada país tiene sus propios problemas específicos por resolver", admitió Von der Leyen.

El presidente del grupo del Partido Popular Europeo, Manfred Weber, calificó la actual propuesta del Consejo para el presupuesto como "pura provocación" por su insuficiencia en áreas como investigación, y pidió "pasar la página del tema de contribuyentes netos y receptores netos", ya que "también para Alemania -contribuyente neto- invertir en Europa es un beneficio".

La presidenta del grupo socialista, Iratxe García, dejó claro que "los recortes propuestos por el Consejo al presupuesto son inaceptables", ya que plantea menos fondos para cohesión, agricultura, investigación o el cumplimiento de los objetivos climáticos", y aseguró que "es imposible hacer más con menos".

El jefe del grupo liberal Renovar Europa, Dacian Ciolos, pidió "modernizar las políticas clásicas" como la política de cohesión y la agrícola común, y dar pasos en favor de los recursos propios para el presupuesto a fin de que esté "construido en torno a los objetivos europeos".

La presidenta de los Verdes en la Eurocámara, Ska Keller, dijo que en el presupuesto plurianual hay que "encajar" los objetivos climáticos en lugar de conceder "demasiadas subvenciones que van en contra del medioambiente".