El presidente de Panamá, Laurentino Cortizo, anunció este lunes que retirará del Parlamento la cuestionada propuesta de reforma constitucional que presentó meses atrás con el objetivo de reforzar la instiucionalidad y combatir la corrupción, y que abrirá un nuevo diálogo nacional con el apoyo de la ONU para redactar otra oferta con más consenso.
El Ejecutivo "va estar solicitando el retiro a la Asamblea Nacional de las reformas constitucionales para abrir bajo" la coordinación "del PNUD un amplio diálogo nacional inclusivo y ordenado", afirmó Cortizo.
El Parlamento se encuentra en receso e iniciará una nueva legislatura, la segunda de este período constitucional 2019-2014, el próximo 2 de enero.
Cortizo hizo el anuncio este lunes en un acto en la Presidencia con la presencia de los jefes de los partidos políticos, del presidente del Parlamento, el oficialista Marco Castillero, y de la representante residente del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Linda Maguire.
En este mismo acto el Ejecutivo y el PNUD firmaron un memorando de entendimiento para el "nuevo proceso de diálogo que concluya en una nueva propuesta de reformas constitucionales", en el que el ente de la ONU actuará como facilitador, no mediador, y que podría tomar entre 5 y 6 meses comenzado a inicios de 2020, dijo Maguire.
El Gobierno de Cortizo presentó ante el Parlamento dos semanas después de asumir el poder el 1 de julio una propuesta de reforma constitucional de 40 artículos que buscaba fortalecer la institucionalidad con el fin de acabar con la corrupción, pero que generó el rechazo de distintos que acusaron que fue redactada de forma excluyente.
La propuesta fue redactada durante nueve meses por la Concertación Nacional, un ente creado en 2008 que reúne a representantes de una veintena de sectores nacionales, que la entregó a Cortizo apenas este asumió el gobierno.
Diversos sectores, especialmente los estudiantes universitarios, que se lanzaron a las calles en manifestaciones en las que hubo hasta un centenar de detenidos, acusaron que la Concertación no representaba a todos en el país.
Y una serie de cambios aplicados a la propuesta de reforma original durante la discusión en el Parlamento, de amplia mayoría oficialista, profundizó el rechazo al documento y complicó más el futuro del proyecto, que debía ser sometido a referendo popular tras su paso por el Legislativo.
Cortizo dijo este lunes dedicó "muchísimas horas a escuchar no solamente a los estudiantes, sino también a trabajadores organizados, gremios, medios" de comunicación, y que por ello llegó a la decisión de retirar el proyecto presentado al Parlamento, que lo aprobó en la primera de dos discusiones obligatorias.
El gobernante exhortó a los "presidentes y secretarios generales de partido políticos (...) a llegar a un acuerdo nacional de mejorar este contrato social" que es la Carta Magna.
"Sabemos perfectamente bien lo débil que están nuestra institucionales", así como la situación del sistema de administración de Justicia y sus efectos "en la corrupción y la desigualdad", recalcó Cortizo.
"Unamos fuerzas" para "darnos una reforma" constitucional "que perdure en el tiempo", añadió el mandatario.