El disidente cubano José Daniel Ferrer, líder de la Unión Patriótica de Cuba (Unpacu), se encuentra confinado en una celda de castigo en la prisión tras cumplir cien días detenido por una presunta agresión, denunció este viernes un portavoz de ese grupo opositor.

Ferrer está castigado en la prisión de Aguadores, en la provincia oriental Santiago de Cuba, porque se niega a vestir el uniforme carcelario debido a que él considera que "no es un delincuente", según dijo hoy a EFE el activista de Unpacu, Carlos Amel Oliva.

"Le dan colchón solo en la noche y se lo retiran de día, no le permiten tener sus pertenencias junto a él y tiene que pedir permiso a un oficial para tener acceso a ropa y alimentos recibidos de sus familiares", refirió el portavoz del grupo opositor.

Asimismo relató que el pasado 27 de diciembre la esposa de Ferrer -Nelva Ortega- e hijos "lo pudieron ver por 2 o 3 horas en presencia de oficiales de la prisión" y en esa visita más reciente lo encontraron "más animado".

No obstante, Oliva señaló que el opositor "no tiene ningún contacto con otros reos, solo recibe la visita de oficiales de alto rango, por lo que está bastante aislado".

Ferrer fue detenido el pasado 1 de octubre junto a otros tres activistas opositores y desde entonces permanece encarcelado por supuestamente haber causado lesiones a un hombre, un cargo que su familia y la Unpacu atribuyen a una invención de las autoridades cubanas.

De acuerdo con el portavoz de Unpacu, hasta ahora las autoridades no han comunicado la fecha del juicio contra Ferrer, y que la solicitud de habeas corpus solicitada por su esposa fue rechazada y tras recurrir la decisión sobre ese procedimiento jurídico también recibió a principios de este mes una respuesta negativa.

José Daniel Ferrer, de 49 años, pasó casi ocho años en prisión como parte de los 75 disidentes encarcelados en la "Primavera Negra" de 2003, en su caso por ser uno de los promotores del Proyecto Varela, liderado por el fallecido disidente Oswaldo Payá.

Tras su liberación en 2011 con una licencia extrapenal fundó la Unpacu, desde donde ha mantenido el activismo opositor y ha sido arrestado en varias ocasiones.

Las autoridades cubanas sostienen que Ferrer tiene una "larga trayectoria de acciones de provocación contra el orden público y la legalidad".

El Gobierno cubano considera a los disidentes "contrarrevolucionarios" y "mercenarios" y no reconoce tener a ningún preso político en sus cárceles.