Durante los últimos seis años las grúas han formado parte del paisaje diario de los habitantes del departamento de Seine-Saint Denis, al norte de París. Llegaron a ser 40 funcionando al mismo tiempo durante la fase de mayor actividad y, a mediados de este verano, la última aún daba los toques finales a la primera fase de la construcción de la villa olímpica, el gran complejo que debe alojar 15.000 personas, entre atletas y acompañantes.
Los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2024 servirán de escaparate al París más monumental: además de la ceremonia de apertura en el Sena, la prueba de ciclismo en carretera pasará por Versalles y ascenderá a la colina de Montmartre, las pruebas de judo se celebrarán en el Campo de Marte –a los pies de la Torre Eiffel– y la esgrima en el suntuoso Grand Palais.