La Unión Europea está obligada a reforzar su unidad, renovar sus instrumentos de actuación ante nuevas amenazas como el terrorismo, el cambio climático, las migraciones o la desinformación y a asumir un papel de superpotencia geopolítica para evitar convertirse en el "terreno de juego" de los demás.
Es la lectura global que hizo este miércoles en su primera comparecencia en el Parlamento Europeo (PE) el nuevo alto representante de la UE para la Política Exterior, Josep Borrell, quien alertó de que "las amenazas se acumulan" y pidió "unidad" a los Veintiocho para hacerles frente.
"Tenemos que adelantarnos a los problemas antes de que sean graves.