En Inglaterra, la gastronomía local está reservada para ocasiones muy puntuales. Un full English breakfast antes de una caminata por el campo, una pie (empanada) en un día de fútbol, un antojo esporádico de fish and chips, un Sunday roast (tradicional comida dominical compuesta por carne, patatas y verduras).
En el día a día, mandan las cocinas foráneas. El recetario indio está muy arraigado por el vínculo histórico entre ambas naciones, pero ahora las comidas de muchos otros países comparten protagonismo. En los sesenta, los restaurantes chinos e italianos se consolidaron como un clásico en todas las partes del país. Entonces, la oferta aumentó y a día de hoy, el panorama asiático lo comparten desde los indios y chinos hasta los vietnamitas, japoneses o coreanos.