El nuevo compacto de la marca checa Skoda, el Scala, es un valor seguro ya que en una longitud de 4,36 metros ofrece uno de los espacios más amplios del segmento, un diseño que cada vez gusta a más gente, tecnología de última generación del Grupo Volkswagen y soluciones que facilitan el día a día.
La marca del Simply Clever (simplemente inteligente) ha buscado un sustituto al Spaceback en el que vuelve a apostar por la polivalencia al ofrecer un vehículo con carrocería de cinco puertas hachtback (de portón ligeramente alargado).
El frontal exhibe la nueva imagen de Skoda, en la que destacan un capó con nervaduras y algo más bajo, los faros alargados con forma de cuña (pueden ser de full led), una parrilla más estrecha y horizontal y una toma de aire inferior que recorre el coche de lado a lado dándole un aire deportivo.