La respuesta de Donald Trump a las protestas contra el racismo está clara: lamentar la muerte de George Floyd –asfixiado por un policía–, mano dura para volver a "dominar" las calles, Biblia en alto con un "tenemos el mejor país del mundo" y pasar página. ¿Y los demócratas? El establishment del partido también ha tirado de Biblia, ha criticado al presidente y ha prometido un paquete de medidas para reformar la Policía. Las respuestas más contundentes vienen del ala progresista del partido, como por ejemplo Bernie Sanders, Alexandria Ocasio-Cortez y Elizabeth Warren.
"Ha llegado el momento de que nuestra nación aborde el racismo sistémico", afirmó este martes Joe Biden, candidato demócrata a la presidencia.