El primer ministro portugués está demostrando ser muy claro en esta crisis del coronavirus, que mantiene en caída libre la economía europea mientras se multiplican los contagios y los fallecimientos en todo el continente. Mientras la UE acaba de pactar un compromiso para una primera respuesta, después de semanas discutiendo, y mientras aún queda por saber el alcance del plan de recuperación para cuando pase la crisis sanitaria, António Costa vuelve a señalar a los Países Bajos como el lastre para tomar decisiones conjuntas en la UE.
Al igual que ocurrió en la pasada crisis financiera, cuando se especuló con el Nexit –el Brexit de Netherlands– casi tanto como con el Grexit, Costa apunta la falta de compromiso holandés con sus socios en momentos difíciles.