El recuento de víctimas en el lado israelí, después del brutal ataque del grupo palestino Hamás este fin de semana, es de 800 muertos y más de 2.500 heridos, incluidos 157 en estado grave. Al mismo tiempo, 560 gazatíes han fallecido, entre ellos 91 niños, y más de 2.900 están heridos, después de los bombardeos que están golpeando incesantemente Gaza desde el domingo por la noche y hasta el momento.
Los ataques han causado muchas víctimas y graves destrozos en dos campos de refugiados de la franja, el de Shati, en la capital, y el de Yabalia, en el norte del pequeño territorio densamente poblado.