La presidenta del Banco Santander, Ana Botín, cobró el año pasado 6,81 millones de euros. El consejero delegado de la entidad, José Antonio Álvarez, cobró otros 6 millones. Ambos redujeron su remuneración debido a la pandemia. El número dos del grupo ha defendido este miércoles el sueldo de los banqueros, que han sido criticados recientemente por la ministra de Asuntos Económicos y vicepresidenta segunda, Nadia Calviño, en un contexto de pérdida de empleo en el sector. "No conozco otro sector en el que los salarios de los ejecutivos estén tan regulados como en la banca", ha defendido Álvarez en la presentación de resultados del grupo.