A Nazifa Yusuf Bek, hasta hace poco diputada por la provincia de Tajar (noreste de Afganistán) en el Parlamento afgano, se le quiebra la voz al teléfono cuando es preguntada por el doble atentado suicida perpetrado este jueves se cree que por la rama afgana (ISIS-K) del grupo yihadista en el aeropuerto de Kabul. Al menos 110 personas, incluidos trece marines estadounidenses, perecieron en el ataque mortal, que también dejó más de 150 heridos.
"Eran casi las seis de la tarde. Llevábamos en el aeropuerto desde las tres de la tarde del miércoles, tal y como nos habían pedido nuestros contactos de la ONG que nos iba a ayudar a salir del país.