El Gobierno ha enfocado los esfuerzos del nuevo ingreso mínimo vital en combatir la pobreza más alta y, en especial, aquella que afecta a los hogares con niños. Con la dotación presupuestaria de 3.000 millones de euros anuales, el equipo del Ministerio de Inclusión que dirige José Luis Escrivá y el de la vicepresidencia de Derechos Sociales de Pablo Iglesias tuvo que ajustar los números para diseñar la renta mínima estatal, que pretenden que llegue a 850.000 hogares. Los cálculos del Ejecutivo de coalición indican que la ayuda permitirá "salir de la pobreza muy alta a más de 400.000 niños, niñas y adolescentes".
Así lo indican a eldiario.es desde el Alto Comisionado para la Lucha contra la Pobreza Infantil, organismo que creó Pedro Sánchez en el pasado Ejecutivo socialista y que en esta legislatura de Gobierno de coalición ha mantenido bajo el manto de Presidencia.