La ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva que sacó adelante el Gobierno argentino del peronista Alberto Fernández se aprobó este sábado después de una ardua y prolongada discusión en el Parlamento, con cruces entre el oficialismo y la oposición.
Mientras el Ejecutivo ha insistido en que la ley es necesaria para poner a "Argentina de pie" -el lema de campaña de Fernández-, la coalición opositora Juntos por el Cambio ha criticado el proyecto, entre otras cosas porque considera que otorga "superpoderes" al Gobierno, e incluso la izquierda lo ha criticado porque, además de eso, considera que sigue beneficiando a empresas y no a los trabajadores.
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