La compañía alemana de suministro energético E.on tuvo el año pasado un beneficio neto antes de extraordinarios de 1.500 millones de euros, como en 2018, y anunció una nueva política de dividendos, aunque confirmó el dividendo por el 2019.
E.on informó hoy de que la facturación mejoró en el mismo periodo hasta 41.500 millones de euros (+37,9 %), por la adquisición de Innogy, la división de renovables y redes de RWE, en septiembre del año pasado.
Asimismo, el beneficio operativo antes de extraordinarios subió hasta 3.200 millones de euros (+6,7 %).
La adquisición de Innogy proporcionó ingresos de 421 millones de euros el año pasado, que fueron generados principalmente en el negocio de redes de Innogy, principalmente en Alemania.
Leer más: E.on tuvo un beneficio neto de 1.500 millones de euros en 2019, como en 2018