Reino Unido salió el sábado de la UE, pero la historia no ha terminado. Ahora, ambas partes deben negociar cuál será la relación futura entre Londres y Bruselas y el primer ministro británico, Boris Johnson, ha anunciado este lunes su posición negociadora. Johnson quiere llegar a un acuerdo de libre comercio, pero rechaza la necesidad de tener que ajustarse a las normas comunitarias.
"No hay necesidad de que un acuerdo de libre comercio obligue a Reino Unido a aceptar las normas europeas de competencia, subsidios, protección social, medioambiente ni nada similar", ha afirmado Johnson, que ha sugerido que la UE también podría adaptarse a las nuevas normas británicas.