En un mundo cambiante de servicios financieros alternativos, y cuando los mecanismos transaccionales proliferan hasta convertirse en un punto de quiebre frente a una parte de las actividades bancarias, las fintech ecuatorianas reclaman su espacio en el área latinoamericana.
La exclusión financiera y las mayores regulaciones bancarias hacen de estas fintech una opción promisoria en la que no pocas empresas del país -de hecho de todo el continente- tratan de poner un pie.
La tecnología permite unir a empresas con el sistema financiero para procesar pagos en línea y facilitar "un mayor acceso a la bancarización", explicó este martes a Efe Daniela Espinosa, gerente general de la ecuatoriana Kushki, que en quichua significa "dinero".
Leer más: Empresas ecuatorianas se abren paso en el competitivo mundo de las fintech