La inflación de la cesta de la compra se ha tomado un pequeño respiro, pero llenar la despensa aún es un 12% más caro que hace un año. En cambio, el IPC general está en el 3,2%. Una inflación de productos esenciales que es "demasiado alta", según asume el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, que, al mismo tiempo, vuelve a salir en defensa de fabricantes y supermercados porque "es consecuencia del aumento de los insumos".
Una subida de precios que "no se le puede imputar ni a ustedes ni a la distribución", ha asegurado Planas en la inauguración de unas jornadas de la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB), la patronal de los fabricantes.