El Parlamento autónomo de Escocia aprobó este jueves una ley que reduce la edad mínima para solicitar el reconocimiento oficial de cambio de género desde los 18 años a los 16 y elimina la necesidad de contar con un certificado médico de disforia de género.
El proyecto de ley ha sido aprobado seis años después de que la primera ministra escocesa, Nicola Sturgeon, lo propusiera tras dos de las consultas públicas más grandes en la historia del Parlamento escocés, según informa The Guardian.
Los solicitantes deberán firmar una declaración en la que aseguren que han vivido al menos tres meses identificados con su nuevo género -seis meses en caso de menores de 18 años- en lugar de tener que presentar pruebas de que han vivido con su nuevo género durante dos años, como requería hasta ahora la ley.
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