El objetivo es el TTF holandés. El mercado mayorista que influye decisivamente en el precio del gas en el resto de Europa, porque no es capaz de fijar un precio adecuado, entre otras cosas, al gas natural licuado, cada vez más presente en la UE en la medida en que se está desconectando del gas ruso.
La Comisión Europea ha difundido entre los 27 una propuesta en forma de borrador sobre un mecanismo temporal, de hasta un año de duración, para evitar que los precios se desboquen en el principal mercado europeo, con el efecto contagio que eso supone.