Los desacuerdos "de fondo" sobre la UE y la reforma de las pensiones entre el Partido Socialista (PS) y la Francia Insumisa (LFI) frenan, de momento, la formación de una coalición de izquierdas para las legislativas francesas de mediados de junio. Mientras que un pacto entre el partido de Jean-Luc Mélenchon y los ecologistas está "a la vista", el acuerdo con el PS se encuentra en punto muerto. Los negociadores socialistas y de LFI han suspendido este viernes las conversaciones, en principio sin una fecha determinada, y en declaraciones a Efe, fuentes del partido de Mélenchon han señalado que "no hay nada previsto" para el sábado.