Buena parte del camino que se inició en Santiago para las nuevas reglas fiscales que encorsetarán de nuevo las finanzas de la UE tras varios años de suspensión del Pacto de Estabilidad y Crecimiento por la pandemia y la guerra de Ucrania llegó recorrido a la reunión telemática de ministros de Economía de este miércoles, donde dieron el visto bueno al nuevo corsé fiscal. El broche final de las negociaciones lo pusieron, de hecho, los ministros de Finanzas de Francia y Alemania, Bruno Le Maire y Christian Lindner, en una cena la noche anterior en la que acordaron los detalles que quedaban pendientes y que tenían un cariz muy técnico, aunque fuera del papel pueden suponer cientos de millones de gasto público.