Las mujeres eslovacas podrán ser obligadas a ver imágenes del feto o embrión y escuchar el latido cardíaco antes de abortar. Es una de las medidas contemplada en el proyecto de ley que el Parlamento tiene previsto aprobar este viernes, y que convertiría a Eslovaquia en uno de los países más restrictivos de la Unión Europea en cuanto a la interrupción del embarazo.
Casi 40 organizaciones, entre ellas Amnistía Internacional, Humans Right Watch y Marie Stopes International, han firmado una carta abierta dirigida al Parlamento, preocupadas por la limitación de los derechos reproductivos que supone esta ley. La propuesta, impulsada por tres miembros del Partido Conservador, también prohíbe la publicidad de las clínicas abortivas y contempla multas de hasta 66.400 euros para quienes promocionen el aborto.