Los dedos apenas consiguen acertar con las letras del teclado del móvil. Tiemblan por el frío. Del meteorológico y, sobre todo, del que recorre tu cuerpo por todo lo que está pasando. Desde hace una hora, Boston es la zona cero del terror. Y tú, aún incrédulo, formas parte de esta película. Quién te iba a decir que ibas a vivir un atentado en primera persona. Con lo lejos que parecen cuando los ves en las noticias. Esas que tantas veces has contado limitándote a leer las palabras escritas en el teleprompter, sin pensar realmente en lo que podrían sentir las víctimas.