Ducharse, lavarse los dientes, beber agua del grifo, cocinar o regar las plantas. Son algunas actividades para las que necesitamos agua. Y que sea dulce. Los habitantes de Uruguay llevan con problemas para realizarlas desde hace casi tres meses. Todo por una sequía que afecta desde noviembre sin precedentes en el país en los últimos 70 años y que ha sido acuñada como "la niña". Ante la falta de agua en los embalses, el 4 de mayo el Gobierno de Lacalle Pou ha respondido mezclando la escasa agua dulce de la que disponían con la del río de la Plata, donde se encuentra una gran carga de sales por su contacto con el Océano Atlántico.
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