Una combinación de buenas noticias económicas a la que sobrevuelan varios fantasmas. Los últimos datos de empleo y de crecimiento económico invitan a echar las campanas al vuelo. España ha superado, por primera vez, los 20,6 millones de personas afiliadas a la Seguridad Social, mientras que exportaciones e inversión tiran al alza del Producto Interior Bruto (PIB).
Y, al mismo tiempo, las decisiones de política monetaria del Banco Central Europeo, para tratar de frenar la inflación, junto a elementos imposibles de controlar, como las sucesivas olas de calor –cada vez más tempranas– y la sequía, amenazan con empañar esa positiva evolución económica.
Leer más: El calor y la sequía amenazan los motores económicos del turismo y la agricultura